Comentarios sobre los carteles de la temporada de la Santamaría 2020
Luego de algunas semanas de
expectativa tras la adjudicación de Casa Toreros como arrendatarios de la plaza
de toros de Santamaria, la empresa, teniendo como cabeza visible en Colombia a
Alberto Cediel, matador de toros retirado y ganadero de El Manzanal, publicó el
miércoles 18 los carteles que conformarán la temporada taurina de Bogotá en el
año 2020, que comenzará el 2 de febrero y terminará el 1 de marzo luego de 5
corridas y una novillada. Tras el debate vivido entre aficionados en los
últimos días, me tomo el atrevimiento de hacer mis comentarios como un
aficionado mas que paga la boleta en el tendido de sol.
Día 1: Toros de Ernesto
Gutiérrez para Morante de la Puebla, Luis Miguel Castrillón y Andrés Roca Rey.
En cuanto a figuras es el cartel de
mas renombre de la temporada, el torero de la puebla del río tiene un halo místico
que otros toreros del siglo XXI han perdido, un misterio que hace que sus mas
fervientes aficionados sigan pagando por ir a verlo a pesar de pasar por las
plazas de América y España entre bronca y bronca (y una que otra oreja sin
discusión), sin duda es un gran atractivo para este día. En sus compañeros de
terna figuran Luis Miguel Castrillón, un torero colombiano que no ha terminado
de encontrar suficiente regularidad en su carrera, y en ocasiones se le ven muy
buenas maneras; y Andrés Roca Rey, la esperanza de la tauromaquia mundial, en
especial por la cantidad de gente joven que está llevando a las plazas.
La ganadería de ese día no deja
mucho que decir, es lo que exigen las figuras cuando cruzan el atlántico y los
empresarios no pueden hacer nada diferente a aceptar, pese a que Miguel Gutiérrez
envía encierros muy serios a Bogotá, quedan debiendo unos puntos de casta en la
embestida.
Día 2: Toros de El Manzanal
para Sebastián Vargas, Manuel Escribano y Jesus Enrique Colombo.
La amistad del empresario con
Sebastián Vargas nos deja el cartel mas tedioso posible, un torero colombiano cuya
tauromaquia no dice mucho (o dice mucho de la falta de arte del espada), con un
español que tuvo un antes y un después en la popularidad de su carrera con el
glorioso indulto a Cobradiezmos, pero que no deja de ser un torero tosco, con
un joven venezolano que parece seguir el camino de los dos primeros. La
ganadería ha tenido muy buenos encierros en plazas menores y en Medellín,
esperemos que mantenga esa calidad para hacer un poco potable esa tarde.
Día 3: Toros de Ernesto
Gutiérrez y Juan Bernardo Caicedo para Enrique Ponce, Antonio Ferrera y Luis
Bolívar
Las exigencias de las figuras
obligan a poner 3 toros más de cada ganadería “torerista” colombiana, en
perjuicio de otras que también trabajan día a día por agradar al aficionado, Enrique
Ponce dejó un recital con toros de Gutiérrez el año pasado y la gente espera
que se repita, Antonio Ferrera, que llevaba algunos años sin venir a Bogotá (creo que su última aparición fue antes del cierre temporal de la plaza),
llega con su nueva tauromaquia que no se ha terminado de definir pero que es
atractiva por mostrar un estilo diferente, y el torero que representa
que los toreros colombianos pueden triunfar fuera de la Undetoc.
Novillada: Encierro de Armerías
para Gitanillo de América(bis), Arturo Gilio y Manolo Castañeda.
Nuevamente el empresario entre la espada y la
pared (o eso quiero creer). El hijo del director de la Undetoc, que lleva 3
años matando todo lo que pase por las plazas de primera en Colombia gracias al
cargo de su padre, y sin mayores méritos que lo ya mencionado, vuelve a
aparecer en Bogotá para evitar que el sindicato amenace con cancelar la temporada,
como sucedió en lenguazaque en el 2019 tras amenazas del sindicato de toreros
por los “cupos de colombianos” que exigen, si yo fuera novillero colombiano lo primero que haría tras este anuncio sería renunciar al sindicato, que solo sirve para complacer al hijo del director de turno.
Arturo Gilio, del que no tengo
muchas referencias, y Manolo Castañeda, novillero entrado en años que a forjado
su carrera en las mas recónditas plazas de México, Colombia y Perú, completan
un cartel para una ganadería interesante que quiere abrirse espacio nuevamente en
una plaza de primera.
Día 4: Toros de Vistahermosa
para José Arcila, Moreno Muñoz y David Martínez
Primero que todo, es una alegría
volver a ver a esta ganadería luego de un muy buen encierro hace algo mas de un
año en Subachoque, las ganaderías tradicionales de Bogotá siempre deben tener
espacio en el cartel.
Moreno Muñoz se hace a un cupo en
su plaza con total mérito después de un percance tremendo en la corrida de la
independencia pasada, es una alegría volver a verlo de nuevo anunciado y frente
al toro. José Arcila se ha venido preparando durante el año con mucho rigor,
sin embargo, produce frustración no ver a Ramsés anunciado en la plaza que lo
vió crecer, teniendo todos los méritos para esto. En cuanto a David Martínez
considero que es un torero correcto, que debería tener el lugar que ocupa Sebastián
Vargas en la provincia, pero no deja de ser un despropósito tener un cartel de
Colombianos con el nivel actual de la tauromaquia local.
Día 5: Toros de Juan Bernardo Caicedo para Sebastian
Castella, Andrés Roca Rey y Juan de Castilla
Otra vez las exigencias de las figuras hacen que tengamos
que ver 6 toros de una ganadería que no ha tenido buenos encierros en los
últimos dos años en Bogotá (no hace falta hablar de los 9 toros de la pasada
feria de Cali), mas allá de un indulto gestionado desde el callejón de la
plaza.
Sebastian Castella hace parte de los 10 toreros que mas
arriba figuran en el escalafón mundial, sin embargo no tiene el jalón de
taquilla que siempre ha tenido El Juli en Bogotá, que de manera inexplicable no
aparece en esta temporada. Andrés Roca Rey -y la empresa- hace una apuesta arriesgada
con un doblete del cual esperamos un triunfo rotundo, y completa el cartel Juan
de Castilla, uno de los toreros colombianos que mas proyección ha tenido en los
últimos años, pese a esto, es su momento para aparecer en una plaza de primera
en la península, y confirmar sus buenas maneras que ha expuesto en los últimos
3 años en Colombia, especialmente Bogotá y Subachoque.
Esperamos que la apuesta de casa toreros suscribiendo un
contrato leonino con la alcaldía de Bogotá, sea bien recompensada, y que no
falte casta en los toros, pues mientras el toro tenga fiereza, la fiesta se
defiende sola.
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